Hay quienes se encomiendan a rezos o remedios tranquilizantes, y otros que sólo convivimos con el susto que da pensar que estamos a miles de metros de altura...
Mis trabajos me entusiasman cada vez menos y salir de mi casa es un sacrificio... Estoy perdida, francamente perdida, vago entre la Toscana, Tailandia o una granja comunitaria...
¿Qué hacer cuando el sueldo no es suficiente para cubrir los gastos básicos de vivir sola? Quisiera evitar a toda costa endeudarme, pero a veces es difícil...
Siempre quise vivir un tiempo en otro país. Ahora estoy preparando todo para pasar una temporada en un lugar que, espero, se convierta en un nuevo hogar...
No hay que ser una celebridad para que un hombre decida depilarse, pero aunque es más frecuente no he tenido la experiencia de tocar un torso suave y listo. Sí sé que los excesivamente los peludos no son lo mío...
Tiempo de reflexión, de cuidar nuestro jardín, podar las plantas, transplantar, sembrar, cortarse el pelo y hacer limpieza de nuestros espacios físicos y psíquicos.
¿Les pasa que, cada cierto tiempo, aparecen unas inevitables ganas de carretear? Este fin de semana me quiero lanzar, y agradezco tener amistades a la altura de las circunstancias...
Estoy saliendo con un chiquillo maravilloso, lo que abre un delirante espiral de autoboicot que probablemente me lleve a convencerlo de que no lo merezco...