por Daniela Paz (@dnlpz)
Este mes comenzó un nuevo taller de Alimentación Sana de Fábrica Zancada, en la primera clase aprendimos mucho sobre la teoría de la comida sana, cambiar conceptos como “comer” por “alimentarse” y descubrir las propiedades de un montón de ingredientes que no conocía y lo rico que podían quedar en nuevas preparaciones, que ya quiero comenzar a cocinar.
Pero mientras escuchaba y aprendía más sobre alimentación, me vino el gran problema que es ¿cuándo cocino?. En mi casa familiar, mi mamá siempre cocinó apurada, trabajaba como profesora, además nos cuidaba a mi hermano y a mí, entonces el tiempo de cocina siempre fue escaso y más bien práctico; por mi parte que también salgo tarde de mi trabajo y me doy cuenta de que si todo mi tiempo libre lo ocupo entre salir a correr o juntarme con amigos, no me queda momento para dedicarle con cariño a la cocina.
Así que mi primera decisión con este taller fue: así como me hago tiempo para mis entrenamientos, para juntarme con la gente que quiero, tengo que tomarme un tiempo para cocinar con amor y no sólo para comer algo en la noche. Le diré chao a los pancitos apurados y al cereal con leche, e incluiré comida que me haga feliz y con algunas técnicas que incluirán bastante el congelado, compras semanales en la feria y tostadurías. Espero llevar a cabo mi misión.
¿Ustedes en qué momento cocinan? ¿Se toman un gran tiempo o lo hacen apurados? ¿Tienen alguna técnica para compartir?
Yo como vivo con mi familoa y la cocina siempre estå ocupada, intento ocuparla el tiempo preciso
Suelo cocinar el domingo para la semana, nada muy elaborado: arroz integral, a veces pollo y otras pescado, algunas verduras rayadas y listo. También aprovecho de hacerme crema de verduras y la congelo. Así, en la semana coml en el trabajo mi comida hecha el domingo. En la noche lo que hago es hacerme huevos y harta verdura!!! Pero quieto con toda mi alma mi cocina propia para cocinar los findes cosas mas elaboradas, que a veced hago en la semana en la tarde cuando tengo ganas y esta desocupada.
Cuando era soltera y sin hijos era super organizada… Hacía una lista semanal con los almuerzos que haría para llevarme al trabajo tratando de ser lo más equilibrada posible (un día carne, uno pescado, uno legumbres, y así). Entonces, el fin de semana compraba en la feria lo que necesitaba puntualmente y así no comprar demás. Esto sirve porque tienes más control sobre lo que comes y te evita el “bloqueo” de qué cocino hoy! Las cosas que requieren más tiempo, como las legumbres las dejas cocinadas el fin de semana y las porcionas para congelarlas e ir sacando una a la semana por ejemplo.
Ahora que tengo niños es más complicado, pero no imposible… si bien yo ya cocino muy poco, hago también el calendario de almuerzos mensual, pero tengo que “negociar” con mis hijos, porque la idea es que sea saludable pero también que ellos se lo quieran comer.