por @patyleiva
Conocí por primera vez la obra de Rogelio Polesello cuando trabajaba en el Taller experimental Cuerpos Pintados de Roberto Edwards. No me tocó trabajar con él pero otros compañeros lo conocieron personalemente al armar su libro y lo describen como una persona amable y sofisticada. A mí me tocó trabajar con las fotos de sus pinturas en cuerpo –entre muchos otros– para armar la exposición y los libros que resumían el proyecto completo.
Las obras que conformaban su ficha bibliográfica llamaron mi atención de inmediato. Tenían una total coherencia con el trabajo que realizó al pintar un cuerpo humano, donde mantenía su gama tonal, pulcritud y simpleza aparente en sus composiciones geométricas constructivistas, vinculadas al op art.
Pero esa fue una sola de tantas intervenciones artísticas de este importante artista argentino. A un año de su muerte, el museo de arte latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), exhibe una muestra llamada “Polesello Joven”, y aborda su obra como una antología entre los años 1958 y 1974, donde desarrolló importantes piezas pictóricas, instalaciones, esculturas, junto con su participación en el mundo del cine, la moda, el diseño y la arquitectura. La muestra busca rendir homenaje a Polesello su importante aporte a la cultura argentina y latinoamericana del siglo XX, por eso nos encontramos con sorpresas como que en una escena de “Tesis” se ve a Ricardo Darín a través de una obra en acrílico suya, por ejemplo.
Por ahora no está contemplado que la expo venga a Chile, pero yo cruzo los dedos porque en algún momento la traigan. Los cuadros, telares y figuras de acrílico son bellísimas, si viajas a Buenos Aires en los próximos meses, anda a verla, es una oportunidad de vivir una verdadera experiencia de arte óptico. Estará en el MALBA hasta el 12 de octubre. Aquí puedes ver imágenes del montaje.