{"id":67075,"date":"2015-01-21T15:15:45","date_gmt":"2015-01-21T18:15:45","guid":{"rendered":"http:\/\/165.22.168.129\/?p=67075"},"modified":"2015-01-21T14:33:30","modified_gmt":"2015-01-21T17:33:30","slug":"una-noche-en-casa-salvador","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/www.zancada.com\/una-noche-en-casa-salvador\/","title":{"rendered":"Una noche en Casa Salvador"},"content":{"rendered":"

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\npor Claudio<\/p>\n

Nunca he cre\u00eddo en esas comidas secretas en que se necesitan c\u00f3digos o invitaciones especiales para acceder, pero la fama de Rolando Ortega -cocinero y due\u00f1o de Salvador cocina y caf\u00e9<\/a>, el restor\u00e1n m\u00e1s reconocido del a\u00f1o pasado- no me hizo dudar. Y acept\u00e9. Y transfer\u00ed las 34 lucas, tomando un poco de aire al hacer click en la p\u00e1gina del banco.<\/p>\n

Al llegar a su casa la situaci\u00f3n es otra: nada de c\u00f3digos ni n\u00fameros secretos ni santos y se\u00f1as, nada. Nos recibe el mismo Rolando y su perro, un pastor alem\u00e1n buena onda y cari\u00f1oso. Casa blanca y sencilla, una patio acogedor. Una parrilla prendida, fuentes con carnes y verduras, y de aperitivo una copa de champa\u00f1a o de sidra, nosotros elegimos. Qui\u00e9nes somos nosotros: la Dani Paz, la Mariana y punto, la Riana Fer y \u00d3scar, entusiasmados conversando mientras de a poco van llegando los otros comensales, la mayor\u00eda extranjeros.<\/p>\n

Luego de un par de copas (y ya con un poco de hambre) pasamos al comedor. Diez puestos, tablas de queso casero y pan reci\u00e9n salido del horno sobre la mesa, para comenzar. \u00a1Qu\u00e9 fome!, dir\u00e1n ustedes, con cara de lata. Para nada, el pan de masa madre, hecho por Rolando con hierbas y cocido en papel mantequilla. La tabla con tres tipos de quesos, brotes y semillas. Bonito. Rico. Y por cierto, con harto vino tinto.<\/p>\n

El segundo plato fueron grandes tostadas con sierra ahumada en forma casera, con mayonesa de leche, alcaparras y lima cortada sobre el pan. Al costado, Rolando pone frascos de vidrio rellenos con verduras encurtidas (pepino, cebolla morada, cebollines) y un sart\u00e9n de fierro con choritos al Bloody Mary. M\u00e1s vino, blanco y tinto. Cada plato, antes de ser comido, es explicado: c\u00f3mo se hizo, la procedencia de los alimentos y su cocci\u00f3n.<\/p>\n

Tercer plato, chancho adobado y asado a la parrilla, pastel de zapallo butternut relleno de prietas (\u00a1dios!), m\u00e1s verduras asadas. Luego, para quien quiera, m\u00e9dula en el mismo hueso, un poco apanado, con flores de romero (\u00a1S\u00ed, queremos llorar!). M\u00e1s vino tinto. El postre fue un poco fome: una mousse de queso con peras hechas en vinagre de manzana. Est\u00e1 claro que lo dulce no es su fuerte.<\/p>\n

Para terminar, dos bajativos hechos por el cocinero: licor de apio y un gin macerado con c\u00e1scaras de mandarinas, matico, hinojo y agua t\u00f3nica. Me hubiese tomado un litro, si es que en alg\u00fan momento de la noche \u2013ya a las dos de la ma\u00f1ana- no nos hubi\u00e9semos dado cuenta de que no est\u00e1bamos en nuestra casa y que deb\u00edamos irnos.<\/p>\n

Mientras esper\u00e1bamos nuestro taxi, Rolando, su encantadora se\u00f1ora y un par de amigos segu\u00edan conversando sin parar, hablando sobre nuevos proyectos. \u00c9l no sab\u00eda que solo en una semanas despu\u00e9s ser\u00eda elegido el chef revelaci\u00f3n del a\u00f1o, por la revista Wik\u00e9n. Nosotros, a\u00fan con el sabor floral del gin en nuestro paladar, est\u00e1bamos seguros de que lo conseguir\u00eda.<\/p>\n

Para pr\u00f3ximas fechas de Casa Salvador<\/a>, pueden estar atent@s a su p\u00e1gina de Facebook<\/a>.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

por Claudio Nunca he cre\u00eddo en esas comidas secretas en que se necesitan c\u00f3digos o invitaciones especiales para acceder, pero la fama de Rolando Ortega -cocinero y due\u00f1o de Salvador cocina y caf\u00e9, el restor\u00e1n m\u00e1s reconocido del a\u00f1o pasado- no me hizo dudar. Y acept\u00e9. Y transfer\u00ed las 34 lucas, tomando un poco de […]<\/p>\n","protected":false},"author":7,"featured_media":67088,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[21],"tags":[19,111],"blocksy_meta":{"styles_descriptor":{"styles":{"desktop":"","tablet":"","mobile":""},"google_fonts":[],"version":6}},"gutentor_comment":7,"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/67075"}],"collection":[{"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/7"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=67075"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/67075\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/67088"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=67075"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=67075"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.zancada.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=67075"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}