Todo empezó bien, llegaron en grupo sus amigos, los que conozco y con quienes hemos compartido en varias oportunidades, pero de pronto se congeló el tiempo, un grupo de minas estupendas llegaron saludando a todos y llenando de besos y abrazos a mi novio.
No conforme con dejarme con esa duda atravesada, este personaje deslizó la idea de que yo era “mala para la cama”. Me quedé para adentro porque debo decir que jamás nadie me había dicho algo así. ¿¿¿¿me pueden explicar qué es ser buena en la cama????
Vivir con un hombre pretencioso que se demora más que una en el baño, que se mira más al espejo, que se perfuma más y más y con distintas fragancias, que se demora en el peinado, etc. debe ser un tema heavy para algunas, y motivo de celos o desconfianza.
Él necesitaba alguien que pudiera darle tiempo, y yo era feliz viéndolo un par de veces por semana y ya. En palabras simples, él me estaba pidiendo algo que en ese momento no le podía dar. Nos queríamos, sí. Lo pasábamos bien, muy bien. Conoció a mis amigos, yo conocí a los suyos. Todo andaba en relativa calma, pero siempre estaba ese fantasma del “necesito más” y el “no puedo”.
La única vez que he sentido algo similar ha sido con un pololo/andante que tuve, que lo amaba con todo mi alma y lo deseaba con todo mi ser, pero en el fondo, me caía como el hoyo! No puedo decir que era una mala persona, no eran cosas terribles, pero lo encontraba pesado. En ese caso podría decirse que lo amaba pero no lo soportaba.
De Tinder nos compartieron un video con 10 tips que, según ellos, mejorará tu perfil y te ayudará a conseguir mejores matches. Hay porcentajes y todo. Si ocupas la aplicación, seguro que más de algún consejo te será útil.
Cuando se comete una Infidelidad, lo mejor es confesar o mentir hasta la muerte? es una gran duda que me carcome el alma, y sigo sin decidir si decir la verdad servirá para algo más que complicar las cosas y romperle el corazón a mi pareja.
En 2015 conocí a mi actual pareja, quien es un pelotudo de esos que entregan el amor a migajas, de esos a los que hay que pedirles que te abracen… Lo nuestro ha sido por capítulos inconclusos, capítulos intensos y viajes increíbles.
A veces una aprende a porrazos, como me tocó ahora, por eso no quiero volver a pasar por alto los sentimientos de otros nunca más, porque duele, duele más que la misma mierda, y nadie debería hacer lo que no quiere que le hagan.
