Nos enseñaron la receta de Kombucha, un té fermentado de origen Chino (221 a.c), una bebida a la que se le han adjudicado varios beneficios. Se dice que favioece el tránsito intestinal, regula la flora intestinal, tiene efectos antibacterianos, desintoxica, estimula la circulación, facilita la absorción de minerales, vitamina B12 y vitamina K, mejora el rendimiento del oxígeno en las células.
Es por eso que compartimos la receta que la chef y coach argentina Genoveva Tenaillón nos enseñó en el lanzamiento de Luna 3 de Foreo para reforzar el principio de que tener una piel renovada e iluminada comienza desde adentro y la kombucha podría ser una buena fuente de probióticos.
Ingredientes:
Agua
Té
azúcar
scoby*
Preparación del SCOBY* (cultivo de bacterias y levaduras)
Comprar kombucha comercial y guardar el último chorrito (SCOBY).
Infusionar 4 cucharadas de té verde o negro en un litro de agua y agrega una cucharada de azúcar. Una vez que esté frío, agregar el chorrito de kombucha.
Colocar en una botella y tapar durante dos semanas con una servilleta para que el oxígeno pueda entrar y el dióxido de carbono, salir. Esperar hasta que vea una capa gruesa y blanca en la parte superior. ¡¡Ese es el SCOBY!!
Preparación de la kombucha
Preparar una infusión de 4 cucharadas de té en un litro de agua y 2 cucharadas de azúcar.
Se enfría, cuela la infusión y agregar el cultivo SCOBY. Tapar con una servilleta y dejar reposar 7 días temperatura ambiente.
Segunda fermentación:
Debes dejar reposar durante una semana más en una botella hermética para lograr gas.
Quitar el SCOBY.
Ponerle especias, hierbas aromáticas y fruta.
Deja reposar la kombucha una semana más en el refrigerador.
