Papitour: el eterno placer de ver a Bosé

Bosepapitpor Patty Rabanales G.

No importa cuántas veces uno lo haya visto ni que las canciones sean las mismas de siempre. Miguel Bosé sabe cómo echarse al público en el bolsillo.

Ni su pancita ni sus canas, y mucho menos sus 50 años, hacen disminuir su sensualidad y carisma.

En dos horas de concierto Bosé hizo lo que quiso: cantó, bailó, sonrió, coqueteó (con hombres y mujeres) y se dio el lujo de dejar fuera del repertorio algunos de sus mejores temas. Sin embargo, el movimiento de pelvis en Morena Mía y su ternura en Amiga y Te Amaré, fueron más que suficientes para que el Arena Santiago se volviera a ratos un espectacular coro y a ratos un verdadero griterío.

No hay renovación en canciones, y quizá tampoco en gestos o palabras, pero sin duda, siempre es un placer ver a Miguel Bosé en vivo.

En esta visita a Chile (quizá la número 30), el español demostró que sigue vigente y que es él quien manda.

Sobrio, de negro y blanco, y sin discursos más que los de su propia música, el protagonista de Tacones Lejanos enamoró por enésima vez a mujeres de todas las edades y nos dejó (porque me incluyo) con ganas de mucho más.

Aunque canceló una gala especial y el segundo concierto (debido a una influenza), el primer show salió como de costumbre, sin momentos bajos y con un Miguel con varios matices de verdadero hijo de capitán trueno, pero más Bosé que nunca.

(Foto: música.pro)

4 Comments

  1. he ido a varios recitales de Miguel Bosé y son lo máximo… a estos no fui porque me pareció too much, pero ahora que el segundo concierto quedó para febrero creo que definitivamente me lo repito de nuevo, aunque sea sólo para verlo bailar Bambú.

  2. Me encanta!!! No me pierdo ninguono de sus recitales, y ahora tuve suerte y fui el viernes. A pesar de haber estado enfermo bailó y cantó INCREIBLE!! Y lo mejor de todo es q está cada día más rico!!

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