Camilo Catrillanca

Rabia e impotencia: Mataron a Camilo Catrillanca

Pasan los días y los hechos entre que se aclaran y se oscurecen. Destrucción de evidencia, obstrucción a la justicia, dados de baja. Y Camilo Catrillanca sigue muerto.


POR SUR
Hoy solo siento más tristeza e impotencia luego de las últimas noticias conocidas sobre la muerte, homicidio más bien, del comunero mapuche Camilo Catrillanca.

Pasan los días y los hechos entre que se aclaran y se oscurecen. Destrucción de evidencia y obstrucción a la justicia. Destituciones y dados de baja. Y Camilo Catrillanca sigue muerto. Su papá sigue -como desde el primer día- reclamando su inocencia y pide hablar con el ministro Chadwick. Las demandas del pueblo mapuche, tan necesarias, siguen tratando de ser catalogadas de terrorismo.

¿Qué pasó luego de que carabineros adulterara documentos luego de la desaparición de José Huenante -el primer detenido desaparecido en democracia- en Puerto Montt?

¿Hay culpables condenados luego de la Operación Huracán de Carabineros de Chile que manipuló las pruebas que incriminaban a los detenidos?

Que no me culpen por no creerle a nadie. Que no me digan que me he vuelto extremista. Que no se quejen cuando la rabia de todos los que estamos enojados se multiplique, se expanda, y no podamos quedarnos de brazos cruzados.

3 Comments

  1. Creí que esta página era de chicas, con temas livianos, consejos varios, no por que sea de chicas, más bien de nuestras cosas usuales…
    Me ha emocionado profundamente esta nota… ha pasado demasiado tiempo de impunidad en contra de muchos grupos indígenas en Chile y vemos q también en el mundo.
    Gracias por crear conciencia, gracias por estar ahí y tratar este tema q es tan doloroso para nuestro pais. Gracias a quien hizo la nota y justicia para los caídos

  2. Que bueno que Zancada aborde estos temas también. Que vergüenza que aún haya gente demente (porque no creo en la maldad, solo en la locura o la estupidez) que justifique el hecho.

  3. El abuso de poder de Carabineros y, de las autoridades, se ha vuelto ya una costumbre y los chilenos seguimos aceptándolo, estamos tan imbuidos en trabajar, en lograr metas, en cubrir gastos que nos han deshumanizado, somos máquinas. Hoy siento dolor y verguenza ser parte de un país que no se alza ante la injusticia social. Mala educación, pésima salud, alza constante en el costo de vida, difícil es comer y alimentarnos bien y nada hacemos, nada decimos. Estamos llenos de Smarphone y celulares (quizás una forma de evadir la realidad). No pensamos y este aparato nos ha vuelto estúpidos.
    Solo jóvenes estudiantes se han atrevido a enfrentar este gran elefante, pero los han criminalizado, y, allí están nuestros liceos emblemáticos, siendo invadidos por fuerzas especiales, golpeando jóvenes, infiltrados, haciendo dano y nada hacemos, nada decimos. Adiós Camilo Catrillanca, ojalá tu muerte no sea en vano, quizás despierte a este país sumido en la ignorancia, pobreza humana y social.

Comments are closed.