por @patyleiva
Usain Bolt terminó su carrera de una forma inesperada e injusta, pero eso no debe empañar su carrera de éxitos y su grandeza deportiva.
Fue un calambre el que lo hizo caer al suelo en el cierre de los 400 x 100 de la final de Londres 2017. No hubo nada que hacer, sus casi 2 metros de humanidad se desplomaron en plena pista sin posibilidad de recuperación. Hasta a los súper hombres les pasa.
Su compañero, Yohan Blake culpa a la organización por haberlos tenido esperando con frío durante 40 minutos antes de entrar. Cuenta que Bolt sólo repetía “lo siento, lo siento”, pero él –como, imagino, todo Jamaica–, están agradecidos por todos los triunfos y le ayudarán a superar este amargo momento que la historia difuminará, con la distancia del tiempo.
Nos hubiera gustado verlo festejando su retiro de las pistas con su preciosa sonrisa, haciendo bromas a las cámaras y despidiéndose de las graderías, pero la vida lo hizo dar otra lección que quizás aún no comprendemos, pero queda claro que la motivación que este hombre ha dejado en millones de personas, especialmente niños durante sus 9 años de carrera, nunca fue en vano.
Gracias por habernos dado el placer de verte correr. Usain Bolt, sigues siendo el hombre más rápido del mundo.
