por Fernanda
Hubo una época en que era el Grinch de la gift card en cualquier ocasión, no me limitaba sólo a lo navideño.
Lo consideraba frío o que casi que me la regalaban para salir del cacho de pensar en algún regalo que me gustara… esto principalmente porque a mí me gusta hacer regalos súper pensados y regalar cosas que a la gente realmente le gustan o que quizás ellos no se comprarían, como algo más chistoso quizás. Por eso cuando me llegaba una giftcard era sinónimo de que 1) no me conocían o 2) no se dieron el minuto de buscarme algo.
Pero con los años (y la madurez también) le he dado el valor que merece a esa tarjetita tan salvadora, porque ya sea por el poco tiempo que a uno le queda por la pega o por el miedo a meter la pata con tu regalo, es una opción totalmente válida. (Aunque siempre me da cosa esto de saber o que sepan los montos invertidos en los regalos, eso sigue sin gustarme).
A lo mejor no quedará en la memoria de alguien, ni será tan significativa como otro tipo de regalo, pero sí le reconozco la gran labor que cumple en días de estrés navideño, largas filas y el descontrol general de estas fechas.
¿Ustedes aprueban o no la gift card?
Foto: tales of a wandering youkai vía Flickr con licencia Creative Commons
Me encantan…. la verdad que mi situacion economica anda media tiritona entonces valoro mucho mas tener las gift y usarlas en algo que realmente me servirá, usare yo o mis pollos y por tanto tiene mucho más valor que el que me regalen algo ultra pensado pero que no me saca de ni un apuro.
De hecho creo que es mucho mas delicado ayudar con una gift card a alguien que está medio mal de plata.
Me eh topado con tanta gente regodiona que nada le gusta y son tan requete complicados con los regalos que creo es la mejor opción. Anda y cómprate algo a tu gusto, porque son de los que ni siquiera les importa el tiempo que uno se tomó y la preocupación por un regalo.
Así que son super salvadoras.
Esta Navidad sólo le hice regalo a mis sobrinas pequeñas, tres regalitos y fueron unos tazones de una institución que con los fondos que recibe ayuda a salvar a perros y gatos abandonados. Este año, no sé si seré más Grinch o tal vez menos, depende del punto que se mire, encuentro una tontera regalar cosas para navidad. Puro consumo, puro estrés, puro gastos gastos y gastos. Filo.
Por eso quise hacer un regalo significativo a mis sobrinas y sería.
Asi que tampoco comulgo con las gift card.
Adiós consumo navideño.