por Cux, foto @patyleiva
A principios de los noventa conocí la banda que alteró mis gustos musicales. Sonaba completamente distinto al resto de música que yo conocía. Era algo raro, distinto, original. Siempre pensé que Primus era el tipo de banda que amabas u odiabas.
No tenían la composición clásica de una banda de rock. La increíble y tan reconocible forma de tocar el bajo de 6 cuerdas mezclada con la voz aguda-nasal-distorsionada y llena de trabalenguas de Les Claypool fue lo que los hizo únicos y que a mi me gustaran. Los vi de teloneros de FNM el año 2010 en el Bicentenario de La Florida, donde me dí cuenta del gran público que tenían. Si bien no eran un grupo tradicional, tenían miles de fieles seguidores. Un poco de sicodelia, un poco de funk, polka, metal, jazz y mucha ironía de la mano de 3 virtuosos. Eso es Primus.
Les Claypool, Larry Lalonde y Tim Alexander vuelven en –para mi– el formato perfecto: el Teatro Municipal de Santiago, para el que agotaron sus entradas para el primer concierto que tenían agendado, abrieron nueva fecha y pasó lo mismo. Hoy hay un tercera oportunidad y quedan disponibles las entradas de entre $55.00 y $77.000.
Me recuerdan a Mr. Bungle, a Infectious Grooves, a los Butthole Surfers, un poco mi juventud llena de MTV, Ren & Stimpy, South Park –cantan el tema central de la serie-, videos en stopmotion, y a varios de mis amigos de los ´90.
Junto a Sailing the Seas of Cheese su tercer disco y que los hizo realmente famosos, Tommy the Cat debe ser uno de los temas más desquiciados y perfectos en mis gustos musicales personales, que espero escuchar este 4 de marzo y que no tocaron el año 2010, la única vez que los he visto en vivo.
