por Paty Leiva
Se podría decir que Gregory Crewdson es a la fotografía lo que Edward Hopper es a la pintura. Ambos recrean escenas sin un antes y un después, que logran intrigar e inquietar por su naturaleza oscura, calificada hasta como siniestra en algunos casos.
Gregory Crewdson, hijo de padre sicoanalista, produce casi cinematográficamente cada una de las imágenes que retrata, iluminando de manera impecable y totalmente intencional tanto a los espacios como a los personajes.
Revista Joia realizó una entrevista al artista en la edición #8 Geometric, de la cuál extraemos algunas preguntas y respuestas:
Por Melanie Cross (para Joia Magazine)
-¿Podrías explicar tu arte a nuestro público?
No sé si puedo explicarlo, pero diré que soy un fotógrafo y que estoy muy interesado en usar la luz en el color de una forma muy específica, para crear ese tipo de mundo específico, que es muy distintivo. Básicamente es una mirada del mundo. Creo.
-Dices que el mundo cobra sentido cuando creas estas fotografías. ¿Es ese un modo de relacionarse con la realidad?
Primero tengo que decir que trabajo con un gran equipo de producción, razón por la cual mis fotografías guardan estrecha relación con el cine, y ese aspecto es sumamente importante en cuanto a lo estético de mi trabajo. Respecto al sentido que cobra el mundo, creo que en mi trabajo estoy más que nada interesado en la tensión entre mis propias verdades, el uso de artificios y la realidad. Me gusta cuando todo eso se reúne en las fotografías.
-Mencionas que todo artista tiene una historia que contar…
Claro, creo que todo artista tiene una historia que contar, y creo que al final esa historia queda como un misterio o como una pregunta, porque me parece que parte del ‘trabajo en progreso’ es tratar continuamente de redefinir lo que esa historia es. En otras palabras: la razón por las que hacemos fotografía es para tratar de saber lo que esa historia es…
-¿Y qué has resuelto hasta el momento?
Mmm… Bueno, buena pregunta. Realmente no lo sé. Pero puedo decir que lo que un artista hace es una suerte de doblamiento continuo de sus fascinaciones y sus centros de interés. Yo, por ejemplo, estoy muy interesado en tratar de encontrar una sensación inesperada de belleza, o un extrañamiento dentro de vidas ordinarias.
-Que sería lo que hizo Hopper, ¿no?
Sí. Y creo que también hay una suerte de soledad en mis fotografías, y también estoy interesado en crear un sentido de belleza a través de la iluminación del color. Esas son partes de la historia, supongo. Pero necesariamente, la historia final se mantiene como un misterio.
-Por eso en lugar de filmar películas haces fotografía…
Sí. Porque creo que siempre he sido un fotógrafo, principalmente porque pienso en contextos de imágenes quietas. Y mi influencia central siempre han sido fotógrafos, entonces me veo saliendo desde esa tradición. A diferencia de los directores, no estoy interesado en qué sucede antes o después de mis imágenes. Sólo quiero la imagen individual. Tratar de hacerla lo más misteriosa y bella posible.
-Tu acercamiento a tus propias fotografías, ¿es estético o más bien psicológico?
Ambos. Creo que es difícil separarlos, pero por el hecho de que mi padre sea un psicoanalista, supongo que mi trabajo siempre ha tenido un impacto psicológico. No puedes separar la psicología de una imagen con su estética; estos dos aspectos siempre han ido unidos en mis fotografías.
-Buscas escenarios relacionados con Estados Unidos, clase media y esa soledad que sólo se da acá. ¿Has pensado en nuevos escenarios fuera de Estados Unidos?
¿Sabes qué?… Estoy trabajando en este nuevo proyecto del que desafortunadamente no puedo hablar, porque aún no está resuelto completamente, pero sí diré que es dramáticamente diferente a lo que he hecho hasta hoy, en casi todo sentido. Por primera vez estaré sacando fotos fuera de este país… No puedo decir más que eso por ahora, pero cuando llegue el momento te prometo que te hablaré de ello.
Para leer la entrevista completa, visita joiamagazine.com
Qué fotografías más hermosas.
Bellisimas….
Se pasó con las fotos.
Que fotografías…!!! Me gustó mucho
Amé la primera…
me encantan la sombra que dan los árboles frondosos por la noche cuando interfieren con la luz de los postes (juajuaja, que lugubre). cuco.
No le encontré ni un parecido con la obra de Hopper.
Las atmósferas de luz que se forman en las pinturas de Hopper y los quiebres casi violentos de luz y sombra …siento que no hay similitud, en la última hay un parecido composicional de la mujer…
Pero de ahi a más…
Qué buen post 🙂
Inceible fotografo, que bueno saber que Melani Cross escribe en Zancada, una buena sorpresa. Felicitaciones
A mi me gusta. hay muchas de sus fotografias en internet para ver.
Lo ví en esta edición de Joia (sí, me la compré influenciada por Z) y aun no he leído su entrevista.. no me llamó mucho la atención