Por Jocelyn Jara
Hasta el 1 de septiembre, el Teatro Municipal de Las Condes estará presentando la nueva co-producción junto a Cultura Capital, “Es por Amor, el musical de Rock Latino”, obra musical dirigida por Paula Barraza y ambientada en la década dorada del rock en español, un espectáculo que emociona y que cuenta con una gran puesta en escena.
Con una escenografía que se compone por una gran plataforma circular que gira y que simula distintas locaciones, los actores van desplegándose mientras bailan, cantan e interpretan sus papeles, en una maniobra que, como sabemos, es difícil de lograr de buena forma en simultáneo, pero que aquí funciona perfectamente. Esto, acompañado de una banda en vivo que toca clásicos del rock latino ochentero como “De música ligera”, “Paramar”, “A rodar mi vida”, “Demoliendo hoteles”, “Pronta entrega”, entre muchas otras que a su vez musicalizan las cuatro historias de amor que se presentan.
La actriz Montserrat Ballarin se refirió a la preparación que tuvo para esta obra. “Siempre es difícil, pero tuvimos hartos ensayos con la banda, porque también es un montaje súper híbrido, en el que la escenografía actúa mucho, y hay música incidental. En mi caso, yo tomé clases de canto, porque siento que el rock justamente es algo que está fuera de mi registro más cómodo”, sostuvo.
En cuanto al desafío que significó para estas actrices y cantantes interpretar canciones originalmente cantadas por hombres, Vivianne Dietz afirmó que “hay que buscar de pronto ciertas herramientas, porque no es el registro habitual de nosotras, no es el registro habitual de las canciones como en su naturaleza, como dices tú, que están cantada por hombres. Es encontrar esos sonidos y hacerlos cercanos a nosotras también, sin que pierdan la esencia de cada canción”.
“Los Prisioneros, Soda Stereo, que es como lo que más se canta, no se nota tanto, no se echa tanto de menos la voz de los hombres, defendiendo aquí la feminidad”, añadió Dietz.
Por su parte, Ballarin agregó que “la reinterpretación tenga el sello que la versión original tiene, pero que también se encuentre a mitad de camino con lo que uno es, desde donde lo interpreta y lo que el instrumento de uno tiene también”.
El reconocido actor nacional, Héctor Noguera, a sus 87 años se aventura en el teatro musical, encarnando un personaje entrañable que cumple el sueño de su pareja interpretada por la también destacada actriz Maricarmen Arrigorriaga, quien desea casarse. Detrás de esta propuesta hay una triste realidad, puesto que a ella le queda poco tiempo de vida. Montserrat Ballarin es la nieta de la pareja, y por su parte vive otra historia de amor que, hasta ese momento, está inconclusa. “Sí, lo lindo de la trama es justamente ver el amor en tres distintas posibilidades. Una pareja que se está recién conociendo y que enganchan. La segunda pareja que ya llevan 20 años juntos y que se están separando. Y la tercera pareja que llevan 40 años juntas y que deciden casarse”, comentó Maricarmen Arrigorriaga sobre estas historias de amor.
Es en este sentido que Josefina Fiebelkorn y José Antonio Raffo, interpretan a dos jóvenes que se conocen casualmente y se gustan, pero su romance no llega en el momento indicado. Es aquí donde, quienes no vivieron en los 80, podrán hacerse una idea de cómo los chicos y chicas se conocían por esos años y se aventuraban por las calles de Santiago observando lugares icónicos como el letrero del vino Valdivieso.
En contraste, Francisca Imboden y Rodrigo Soto, son una pareja cuyo matrimonio enfrenta una fuerte encrucijada, en donde están a punto de separarse pese a las más de dos décadas que han compartido juntos.
Todo esto llega telefónicamente al estudio de radio en donde el personaje de la actriz y cantante Vivianne Dietz, recibe estas historias y les dedica canciones que ella misma luego interpreta. Sobre la preparación para encarnar este papel, pero también capturar la esencia de la juventud de la época, Dietz comentó que “hicimos un trabajo en conjunto con la directora, buscar referentes también, ver películas, ver harta entrevista de esa época, en mi caso, que soy la locutora. Un poco de todo. Y también, de pronto, las referencias cercanas a nuestros padres: yo les pregunto a mis papás, por ahí, por la música”.
En esa misma línea, Montserrat Ballarin apuntó a que fue “agarrar la esencia del rock, que también es un estilo que tiene características súper propias, que es súper diferente ideológicamente, podríamos decir, que lo que pasa en los noventa o 2000, que ya es el pop, que ya es la figura, es el frontman. En el rock es la música, es lo colectivo, y eso responde también a una cosa que está pasando socialmente. Entonces, fue un trabajo en las escenas y en lo musical, y de abordarlo desde lugares diferentes”.
Un gran espectáculo que hace rememorar aquellos años de juventud para muchos y recrea pasajes no vividos para las nuevas generaciones que se encantan de la música que acompañó a sus padres. Finalmente, las actrices Vivianne Dietz, Montserrat Ballarin y Maricarmen Arrigorriaga reflexionaron en torno a esta especie de revival o retromanía que se vive a cada cierto tiempo con respecto a la década de los 80 en Chile. “Yo creo que puede ser un poco tratar de captar esa emoción del recordar y la nostalgia, que es un sentimiento tan potente en la sociedad, sobre todo con estas épocas tan memorables. Hablar de los 60, por ejemplo, o hablar de los 80, son épocas súper particulares en donde la gente de esa generación quiere reencantarse con tantas cosas tan distintas como a la naturalidad de hoy en día”, sugirió Dietz.
Ballarin sostuvo que “la historia se entiende como en retrospectiva, las cosas se te ordenan cuando miras para atrás y las entiendes. Y creo que no estamos viviendo una época tan distinta en un montón de sentidos, estamos situándonos en los ochenta y hartos, casi noventa, que fue un gran momento de tránsito de la dictadura a la democracia, una democracia con una cantidad de vacíos legales rarísimo, que son esos momentos de grandes cambios de paradigma, y que creo que es muy parecido a lo que pasa hoy, una gran revolución”.
“Son clásicos textos que tienen que ver con el rock de los ochenta, de que ahora sí las cosas van a cambiar. Una juventud que quiere empujar las cosas a ciertos lugares, quebrar lo establecido. Es muy difícil entender el contexto de uno cuando está ahí metido dentro. Entonces es convocar a esa emoción”, cerró.
Mientras que para Maricarmen Arrigorriaga, este fenómeno se explica por “esta excelente música que tuvimos en nuestro país y también en Argentina: el rock latino argentino marcó la década a fuego, la verdad, y se nota hasta el día de hoy. Las canciones están más vivas que nunca en ese sentido. Y también yo creo que tiene que ver también con el hecho de estar el dictador Pinochet en nuestra cabeza, por lo menos en la de los viejos, y eso está también marcado a fuego”.
“Como estaba la represión, nosotros trabajábamos el doble y hubo efectivamente mucho trabajo actoral, mucho trabajo en televisión y en cine, justamente por la represión que existía”, finalizó la recordada y destacada actriz.
“Es por amor. El musical de rock latino”, estará en cartelera hasta el 1 de septiembre, con funciones de jueves a sábado a las 20:00 y los domingos a las 18:30 horas. Las entradas se encuentran disponibles en www.tmlascondes.cl, y en la boletería del Teatro Municipal de Las Condes ubicada en Av. Apoquindo 3300.