Entrevista: Valentina Escorza, la primera chilena en el Cirque du Soleil

por Lala

Valentina nos responde estas preguntas desde Alemania, donde está pasando una temporada con el Colectivo Racun, con quienes está de gira con la obra de circo-teatro, Interferencia. De personalidad inquieta, busquilla, curiosa, Valentina dejó Chile cuando terminó el colegio. Doce años después, se prepara para instalarse en México, donde protagonizará Joyà, el espectáculo del Cirque du Soleil en la Riviera Maya. Si bien algunos chilenos ya han pasado por las filas de este reconocido circo, Valentina será la primera mujer en unirse a uno de sus elencos.

Entiendo que estudiaste en Italia, cuéntame cómo llegaste allá y cómo fue tu experiencia.
Así es. Pero no estudié propiamente tal. Creo mucho en el entrenamiento constante y en aprender sin la necesidad de una institución que avale tu profesionalismo. Me fui cuando tenía 17 años a Italia, ya que no quedé en la Universidad de Chile, porque en las pruebas específicas me dijeron que era muy baja, así que decidí irme a Italia a probar suerte, y después de trabajar en muchas cosas distintas mientras aprendía el idioma, conocí la compañía Teatro dei Venti, donde me formé. Trabajé con ellos por cinco años, estudiando y formándonos con grandes maestros del teatro europeo, antropológico y físico, viajando por diferentes ciudades presentando obras de teatro callejero y de sala, teatro consciente, político y físico.

¿Qué aprendizajes te dejó la autoformación?
Que tiene una responsabilidad gigante, porque no puedes dejarte estar. Tienes que mantenerte en movimiento, en aprendizaje constante, teórico o práctico. Creo que la forma de medir hoy a un buen profesional es la forma equivocada, ya que sin tener un título te castigan pagándote menos o simplemente no puedes postular a ciertos trabajos. Promuevo y apoyo la autoformación, humana, artística y profesional.

¿En qué estás en estos momentos?
En estos momentos estoy participando en dos compañías. Con una de ellas, el Colectivo Racun, estamos de gira en Alemania, con la obra Interferencia, de circo-teatro, crítica y política, desde el cuerpo como herramienta de comunicación. También estamos trabajando con refugiados políticos de Siria, Afganistán, África e Irán.

Además estoy trabajando con otra compañía, La Huella Teatro, con quienes estamos girando con la obra Wukong: El gran viaje del Rey Mono. También integro escuela carnavalera Chinchintirapie, en la que pertenezco al cuerpo de figurines, comparsa consciente de reivindicación del carnaval latinoamericano: “en la calle sin permiso yo me educo y organizo”.

¿Cómo se gestó tu participación en el Cirque du Soleil?
Hace dos años estaba en Italia, y llegó a mis manos la información para postular al casting para el montaje Joyà. Postulé y en esa oportunidad quedé dentro de los finalistas, pero tomaron la decisión de no hacer cambio de elenco. Hace un mes, más o menos, me contactaron de nuevo porque se habían interesado en mi trabajo. Hice una nueva postulación, les gustó y me confirmaron que quieren que trabaje con ellos, ya que el rol de Joyà calza con mi propuesta de trabajo.

En este montaje interpretaré a Joyà, una niña de 16 años que hace un viaje para reflexionar sobre la importancia de escuchar a los antepasados y seguir la herencia de identidad, respetando y aprendiendo de nuestros ancestros. Trabajaré con ellos por un año, con posibilidad de renovar el contrato.

¿Cuál es tu disco de cabecera (un disco que te guste completito, de la primera canción hasta la última)?
Uyyy… es complicado. Tengo bastantes discos favoritos, dependiendo del tiempo y momento en el que esté, pero ahora estoy escuchando mucho el disco de Churupaca, Eterno retorno, pero no es el único. También está la Violeta Parra muy presente en este periodo, y con todos sus discos que son una obra maestra.

¿Cuál fue tu primer-primer trabajo?
Cuando llegué a Italia trabajé como barrendera y copera. Con el Teatro dei Venti, trabajé por primera vez como actriz.

¿Qué te gustaría recibir de regalo?
Siempre agradezco un buen libro o un disco. Si no, una buena cena también es bien recibida.

¿Cuál fue tu primera ídola?
Mi primera ídola fue mi madre, y luego Violeta Parra.

¿Qué cosas te hacen sentir de nuevo como niña?
Jajajaja… uy, vivo el síndrome Peter Pan constantemente. Creo que mi niña interna está siempre muy viva, viva lo lúdico y juguetón, consciente y crítico.

¿Cuál es el mejor regalo que has hecho?
Una pintura que le hice a mi madre. Me demoré cuatro meses.

Nombra un (o más) objeto indispensable
Mi compañero marioneta llamado Robinson, que casi siempre viaja conmigo. Un buen libro y mi libreta para escribir.

¿Cuál es la película que más veces has visto?
Creo que Billy Elliot, Pulp Fiction y The Big Fish, entre otras.

¿Cuál es tu mejor manera de perder el tiempo?
Viajando y cocinando.

Cuéntanos una manía insoportable que tengas.
No me gusta nada el frío… me gusta dormir siempre con calcetines jajaja.

¿Qué mujeres de tu vida te han marcado y en qué aspectos?
Las mujeres siempre han sido muy importantes en mi vida, ya sea mi madre y algunas parejas, mujeres significativas que fueron muy buenas compañeras de camino.

Fotos: Valentina Escorza

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