por Paty Leiva
Brave Miss World es el documental de Cecilia Peck sobre el caso de Linor Abargil, quien tenía 18 años cuando fue elegida Miss Israel. Seis semanas antes de que ganara Miss Mundo, mientras modelaba en Italia, fue violada por un agente viajero. Linor decidió hablar, para ayudar a otras víctimas y en consecuencia, luchar por su propia sanación.
Cecilia Peck (hija de Gregory Peck) acompañó a Linor en este camino filmando un documental que nos muestra la transformación de aquella adolescente a la ahora mujer –siempre valiente–, entre los años 1998 y 2013. En el documental, decenas de mujeres se abren y agradecen a Linor por contar esta tragedia públicamente, ya que las ayuda a romper su propio silencio y a empezar a eliminar esa injusta vergüenza que las víctimas de este terrible crimen -que desgraciadamente se repite más de lo que se sabe públicamente- sienten. Las actrices Fran Drescher y Joan Collins son algunas de esas mujeres que fueron víctimas y que entregaron sus brutales testimonios a Linor, con el mismo objetivo de acompañar, alentar y demostrar que esto le puede pasar a cualquiera, y que es necesario hablar y pedir ayuda.
Es impresionante ver cómo muchas veces la sociedad culpa a las mujeres. Muchas de las mujeres violadas decían que no habían hablado por razones como que sus padres o madres las mirarían con reproche; porque el atacante era un compañero de universidad con el que salieron, o porque pensaron que no les creerían. Es paralizante conocer la actitud de algunos policías que tomaban la denuncia, tratando sin respeto a las víctimas, insinuándoles que era su culpa y diciéndoles cosas como “si tus marcas fueran en la cara y no en los tobillos sería más fácil que te crean” o mujeres policías que les comentaban que el atacante era guapo. Inconcebible.
Conversamos telefónicamente con Cecilia Peck sobre sus motivaciones, deseos y esperanzas con este, su segundo documental, que será distribuido vía Netflix desde el 29 de mayo de 2014.
Cuál crees que es la misión más importante de este trabajo: ayudar a que las mujeres se atrevan a denunciar, sacar el estigma de la sociedad, o enseñar a la sociedad y las mujeres a saber qué hacer al respecto?
Bueno, el mensaje de Linor Abargil es que no te puedes sanar si guardas silencio. Entonces, su labor es alentar a las mujeres abusadas a contarle a alguien en quien confíen, a denunciar el crimen y a luchar por la sanación. También necesitamos implementar leyes que protejan a las víctimas de violación.
Lo que a mí me gustaría sería llegar a aquella persona en su casa que se ha culpado a sí misma, que se ha avergonzado o ha tenido miedo de contarle a alguien y darle valor para tomar el teléfono y llamar una línea de ayuda, o a contarle a su madre o a su mejor amiga. Y también me gustaría que este documental sirva para instruir a los miembros de la policía o a la ley, a que si alguien se acerca a sus oficinas a denunciar un caso de asalto o violación, tienen que tratarlo con respeto y ofrecerles credibilidad y recursos y no cuestionar y culpar a la víctima haciéndolas sentir que es su culpa.
Quisiera comentar una frase que dice el muy apoyador novio de Linor: “Ella es más fuerte que yo. Eso me preocupa. No sé que hacer con ella”. Pienso que la mantuviste en el documental por una razón, ¿estás tratando de decir que quizás es un reflejo de la sociedad, que no está lista para las mujeres fuertes?
Para mí fue para asegurar que las parejas, esposos, esposas, apoyos de las víctimas supieran que no están solos, que la violación afecta a todos, no sólo a la víctima. Linor tuvo mucha suerte al tener a un novio –y después marido– que la apoyó muchísimo, un gran mejor amigo y a su familia, pero también fue un desafío para ellos. Por eso es que momentos tan reales como ese debían quedar en el filme, porque, para la audiencia, aunque no sean víctimas sobrevivientes al abuso. Todos conocemos a alguien que ha sido víctima de asalto o intento de violación, ya sea una amiga, o una madre o padre, una hija o hermano o hermana, nos toca a todos. Entonces, la vida de la gente que está alrededor de Linor también ha cambiado, y sentimos que era importante contar sus historias.
¿Alguna vez tuvieron que convencer a Linor de seguir adelante, por ser tan duro para ella?
No. Nunca la presionamos. Siempre fuimos respetuosos y lo más empáticos que pudimos ser frente a lo que ella estaba viviendo. Pero fue extremadamente duro para ella. Fue muy traumático para ella escuchar las historias de cada persona y reconocer lo extendida que está la crisis de la violación en el mundo. Una vez dijo “no puedo hacer esto”. Sus padres estaban muy muy preocupados por ella, su terapeuta estaba preocupada y pensamos que podría terminar.
Le tomó seis meses, pero recibimos una llamada suya diciendo “quiero seguir”. De alguna manera, los años que tomé fueron una bendición, porque nos dieron la oportunidad de seguirla en su notable transformación a través del paso del tiempo, y uno piensa que uno va aprendiendo con ella y mostrando a la audiencia lo que ella vivió.
¿Qué crees que va a pasar con la distibución de tu documental en Latinoamérica? ¿Qué te gustaría que pasara?
Bueno, nuestra misión junto con Linor fue siempre que el mensaje se difundiera globalmente, y Netflix nos dio la plataforma. Es como un sueño cumplido, porque de otra manera estaríamos luchando por meter el documental en cada país, y así no habría garantía de que el filme sea global y llegue a la audiencia para la que fue hecho. Estamos muy entusiasmados con esta alianza, por poder realizar nuestro sueño y llevarlo a los hogares y corazones de gente en todo el mundo.
Veo el documental como una herramienta de sanación para algo horrible que ya sucedió. ¿Qué crees que podemos hacer, como medios, para prevenir estas desgracias?
Bueno, creo que puedes escrbir un increíble artículo sobre Brave Miss World (risas) e incluir nuestro site web bravemissworld.com, para que las sobrevientes sepan hacia dónde ir, que sepan que es un lugar seguro. Seguir reportando los casos de violación en nuestros países, pueblos y ciudades. Decirle no a la cultura que culpa a la víctima y a la tendencia de cuestionar con qué ropa anda vestida la víctima o si bebió o no alcohol, porque eso no importa, si tú no das tu consentimiento, es asalto o violación. Entonces, pienso que es responsabilidad de los medios tener una mirada más profunda que la de los prejuicios de la sociedad y decir la verdad.
Foto de Linor Abargil y Cecilia peck: www.bravemissworld.com
Brave Miss World – Theatrical Trailer from Brave Miss World on Vimeo.
Importante, y valorable.
Wow! Que tremendas mujeres ambas! Muero por ver ese documental ahora
Excelente entrevista por lo demás 😉
Felicidades por la entrevista Paty, ya veré el documental de estas dos fuertes mujeres.
Lo veré!
y sí, qué falta hace educar al respecto, desde las propias víctimas para que denuncien sin temor, hasta todo el aparato que se hace parte del proceso: policía, hospitales, jueces, y un largo etcétera.
“No te puedes sanar si guardas silencio” oh! qué frase tan mágica! yo no pasé ni cerca una experiencia así de traumatizante, pero igual por razones de la salud de mi madre y temas de mi niñez necesité ir a un psicólogo algún tiempo y fue excelente para mí, y también poco a poco hable de estos temas con mis amigas y pareja,y fue cada vez mejor, crecí en mi interior y deje de lado el rencor. Ni puedo imaginar lo difícil que fue para estas mujeres contar todo su historia pero es alentadora e inspiradora para todas las personas y ayuda a prevenir.
Sólo el trailer ya estoy muy emocionada.
Quiero verlo ahora.