Como en la mitad de la segunda temporada de MasterChef, Alfonso se transformó en uno de mis candidatos. SuponĆa que llegarĆa a la final con MaylĆn, al menos, quien se estaba perfilando como una revelación de la cocina. Con el tiempo, empecĆ© a leer un poco mĆ”s sobre Ć©l, sobre cómo le habĆa cambiado el Ć”nimo y hasta habĆa empezado a usar sus guayaberas coloridas. Cuando ganó, me emocionĆ© de verdad por Ć©l. Ā”Al fin algo de justicia en la televisión!
Pero este post no es sobre el programa ni sobre Alfonso, sino que es sobre esas segundas oportunidades que a veces nos regala la vida. Alfonso es un hombre trabajador, viudo, un tipo de sensible y sencillo. Seguro siempre le gustó cocinar, pero entre tanta responsabilidad a veces no queda tiempo. Este programa, para mĆ, fue una excusa estupenda para reencontrarse con su pasión y volverse bueno en ello. ĀæSe han fijado lo fĆ”cil que resulta todo cuando se ama lo que se hace? Sea lo que sea. Y no hablo necesariamente de trabajar en lo que uno ama, porque eso muchas veces no es posible, sino que hablo de la importancia de, aunque sea en un ratito libre, una hora durante el fin de semana, dedicarte a eso que te mueve, eso que te apasiona.
Y no importa si es a los 60 aƱos, a los 30 y a los 20. A la edad que sea encontrar eso que te mueve es un impulso que te hace mirar la vida distinto. Algunas personas que conozco les apasionan los temas de animales, y dedican horas y recursos a rescatar perros y gatos, y darles una nueva oportunidad. Para otros su pasión es la fotografĆa, el tejido, el mosaico, la mĆŗsica. Cantar en el baƱo sin que nadie te vea, o escribir cuentos. Jardinear y conocer de memoria cuĆ”ndo crece cada planta. Da lo mismo lo que sea. A mĆ me apasiona cantar. No me importa si alguien me escucha, si hay mucha o poca gente, me encanta. QuizĆ”s algĆŗn dĆa me atreva a hacer algo mĆ”s con eso, pero mientras tanto me lo guardo para mĆ y recurro a eso cada vez que puedo.
ĀæY ustedes? ĀæEncontraron eso que les apasiona? ĀæLe dedican tiempo?
Si…. Hace poco menos de dos aƱos. Me reencontrĆ© con el dibujo, los lĆ”pices y ha sido algo que con el tiempo crece y crece…. Busco talleres y actividades para aprender mĆ”s. Y el 2015, en medio de una gran crisis de vida y de mucho dolor, el dibujo fue mi rayito de luz que me ayudó a no sucumbir. Es vital tener un pasatiempo que te apasione, le da otro matiz al dĆa a dĆa.