Notas de voz día 2 x Maca Murúa, fotos Mila Belén
El show de Lorde en Primavera Sound Santiago se robó el corazón de todos los que estábamos ahí. Cuando se largó a llover, primero pensé que se iba a caer, luego pensé que iba a ser mucho más diva o que iba a cortar el show o que se iba a poner una capa o algo. Pero no, siguió y siguió y nunca paró.
La puesta en escena fue de un minimalismo increíble, perfecto, la composición de colores, las formas, cómo usaba la escalera y su estructura, las coreografías musicales de su banda, todo era muy cuidado pero a la vez muy mínima.
Tenía brillitos en la cara y se le corrieron todos. En un tema se sentó en la escalera y empezó a hacer gestos de que le dolían las manos, ¡estaba congelada! y así y todo, estaba con la mejor sonrisa, súper empática, muy sincera, muy cercana. Yo creo que a ella no se le va a olvidar nunca el show porque nadie se movió, toda la gente estoica viendo el show, coreando las canciones, lo que demuestra una muy buena recepción del disco nuevo.
Dijo que era consciente de que su música era un poco triste, un poquito depre, y que en algún momento de su vida, con el tiempo, se había dado cuenta de que no estaba mal sonreír y eso se ve reflejado en su disco nuevo.
Sonó muy bien, muy detallista el sonido en un momento tan difícil para el audio en medio de la tormenta (¡entremedio se subieron e anclar las cajas porque se estaban moviendo!).
En un momento empezaron a caer una especie de confetti / cotillón que se veía que estaba pensado y hecho con cariño, porque cada uno tenía un mensajito y dibujos como caracoles, olas de mar, flores, sol, muy su último disco. Todos vueltos locos recogiendo el confeti todo mojado. Hermoso.