POR RODRIGO FERRARI
La leyenda cuenta que Brian Wilson compuso la música de “God only knows” (1966) fumado hasta más no poder mientras escuchaba el Rubber Soul de los Beatles. Quería igualarlos (aunque si hubiera publicado en 1964 su Smile, les habría volado la raja a todos). Luego le pidió la letras a Tony Asher, se metió al estudio y creo unos arreglos musicales que nadie entendió y que -menos mal- lo dejaron incluir -a regañadientes de varios del grupo- en el Pet Sounds de los Beach Boys.
Esta semana no incluí tanta música nueva. Va este parcito. Cuando comienza a sonar “Cellophane girl” (2018) uno tiene esa sensación de que lo ha escuchado antes. Luego ves de quién es y el nombre Tracyanne & Danny no hace sonar muchas campanas. Luego entra la voz de Tracyanne Campbell, inconfundible voz de Camera Obscura (y que según algo que leí por ahí, tiene un efecto caso pavloviano en todos los que nos gusta) todo tiene sentido. Danny Coughlan (Crybaby) es la otra mitad del proyecto. El otro día volví a escuchar Amen Dunes, el proyecto del norteamericano Damon McMahon, que descubrí y les compartí a fines de febrero con las patas en el Lago Calafquén. Su cuarto disco es uno de los buenos del 2018. A alguien le decía que ese sincopado de sus canciones crea una extraña y rica tensión, que el vibrato de McMahon realza con otro extraño y rico misterio. Ahora “Calling Paul the suffering” (2018).
En 1982 la pianista Helen St. John fue invitada por Giorgio Moroder a interpretar una pieza que había compuesto para la banda sonora de Flashdance. El resultado fue “Love theme” (1983) que le valió hasta una nominación al Grammy. Esa escalera descendente con cambios de acorde siempre me han gustado mucho.
“Islamabad” (2017) me la robé de la vecindad hace unos días. Luego la devuelvo. Se trata de un trap-indie-pop de Los Planetas en colaboración con el también español Yung Beef, ya que la base es de su canción “Ready pa morir” (que no es muy buena). Zona Temporalmente Autónoma es un disco del año pasado que tenía absolutamente olvidado y esta canción que se fue -además- directo a la playlist de Cuchareo. “Deixar voce” (1982) de Gilberto Gil es porque tengo la suerte de estar de nuevo en este país hermoso y porque puta que cuesta dejarse ir. “Yo no te pido la luna” (1984) de Daniela Romo es la versión en español de su versión original en italiano que se hizo conocido en el Festival de San Remo, interpretado por Fiordaliso y sonó el viernes cuando ya cerrábamos la oficina. “Seven seas” (1984) de los Echo & The Bunnymen se la robé a una de las listas diarias de Super 45. “Señorita” (2014) es mi favorita de los chilenos Planeta No. “Karamo” (2010) de Afrocubism es como para bailarla con alguien de las manos en el living de la casa.
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Las gráficas de No Tan Random son de Francisca Alcalde y Tomás Dintrans.
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