La aparición de la virgen, de Enrique Lihn

La aparición de la virgen, de Enrique Lihn 1
por Cristóbal Carrasco*

Digamos que no sé nada de poesía. Digamos que, a la hora de leer un poema, es poco lo que entiendo, porque me pierdo en las frases cortas y me aterra no estar notando algo que sé inescrutable. Digamos que, usualmente, sería incapaz de diferenciar un buen poema de un mal poema, y eso ha hecho que deje de leerlos. Por eso, me asombro cuando leo a escritores que se saben de memoria versos de, no sé, José Lezama Lima, porque yo diría “pero si él es novelista, ¿por qué debería leer sus poemas?” y sé que ellos tienen razón y que yo, por supuesto, estoy equivocado.

Pero está Lihn. Me gusta desde chico Enrique Lihn porque el primer libro que tomé de él (unas traducciones de sus poemas al inglés, duh) tenía una foto suya y yo pensaba que me parecía un poco a él, o a esa imagen de él, al menos. Le pregunté a mi hermana y me dijo que no, que él era mucho más feo y por alguna razón, no me gustó su respuesta. Pero tras la foto estaban, duh, los poemas. Y había un verso que me gustaba: “El hijo único sería el mayor de sus hermanos.” También me aprendí otros versos porque, al contrario de las novelas, uno puede encontrar todos los poemas del mundo en internet, y bueno, me gustó más.

Entonces pegué una foto de Lihn en mi pieza. Era la portada de El Paseo Ahumada, libro que yo, un ignorante, adjetivo como hermoso, así que pueden tomarlo de quien viene (¿se dice así?) El libro fue editado por Ediciones UDP. Luego editaron La pieza oscura, Poesía de paso, Diario de muerte y ahora lanzan La aparición de la virgen, una recopilación de poemas políticos (eso dice la portada, no me digan a mí) desde 1963 a 1987. Entonces busco en el google y encuentro un blog con un verso de ese libro: “La película con muchos años de rollo que hacen en sus recintos secretos.” Digo y digo la frase hartas veces: sus recintos secretos, sus recintos secretos. Tengo que leer ese libro, escribo, y dejo de repetir.

*zancudo invitado

7 Comments

  1. He leído algo de Lihn. No mucho en realidad. Han cosas que me han gustado y otras que me he quedado masticando un tiempo. Un día mi papá me contó que lo conoció, que era amigo de un amigo. Desde ese momento se me hizo más cercano (mira lo que es la percepción de subjetiva).
    Me pasó lo que cuentas con Ernesto Cardenal; tenía un poema suyo pegado en la pared de mi pieza. Una vez tuve el honor de conocerlo y hablarle, hace unos años, cuando estaba yo viviendo en Lolol (te cuento el detalle para graficar lo insólito el encuentro). Le conté de ese poema pegado a la pared y le leí unos versitos que yo había escrito… me felicitó por las imágenes de lo que escribí. Sentí algo raro, pero muy agradable. Le conté a mi papá y se sorprendió mucho, lo encontró “maravilloso” (es que de verdad fue extraordinario).
    Uno tiene a veces esas conexiones inexplicables con algún escritor. Leer es una experiencia afectiva. Gracias por compartir y saludos para ti.

  2. Hola, Cristóbal, me alegra que hayas podido dar con parte del poema. Yo me identifiqué con tu “al contrario de las novelas, uno puede encontrar todos los poemas del mundo en internet, y bueno, me gustó más”, también suelo buscarlos por la web.

    abrazo!

  3. He leído muy poco de Lihn. El otro día al abrir el portal de la Universidad aparecía esto como noticia y me dieron unas ganas locas de leerlo :). Vere si paso hoy a comprarlo.
    Saludos!

  4. Lo que sé de Lihn, lo sé por es mi escritor favorito de todos lo tiempos, Roberto Bolaño. Sobre la mensajería que mantuvieron por un tiempo, sin conocerse y estando Bolaño en España, pobrísimo y de como sus palabras (las de Lihn) lo salvaron de una terrible depresión, la depresión de quien escribe y nunca es valorado, y más encima está en la pobreza. Por eso mismo sé de algunos de sus versos, pero no son más que aquellos que es escuché o leí del propio Bolaño. Quizá debería darme el tiempo de leerlo, pero no soy lectora de poesía, por que me pasa que a veces creo no entender lo que se quiere decir.
    Saludos Zancadits!

  5. A mí me gusta, pero suele entristecerme, lo siento como siempre prisionero. Mis favoritos son Jorge Teillier y Oscar Hahn, los adoro a ambos.

  6. Recuerdos de matrimonio, La pieza Oscura y la más perfecta declaración de principios acerca de lo que es la poesía, “Porque escribí”:

    Porque escribí no estuve en casa del verdugo
    ni me dejé llevar por el amor a Dios
    ni acepté que los hombres fueran dioses
    ni me hice desear como escribiente
    ni la pobreza me pareció atroz
    ni el poder una cosa deseable
    ni me lavé ni me ensucié las manos
    ni fueron vírgenes mis mejores amigas
    ni tuve como amigo a un fariseo
    ni a pesar de la cólera
    quise desbaratar a mi enemigo.

    Pero escribí y me muero por mi cuenta,
    porque escribí porque escribí estoy vivo.

  7. Esas ediciones de la UDP son maravillosas, no solo las de Lihn, también las de Parra, Bertoni, Rojas, Zurita, de Rokha, Armando Uribe (<3) etc. etc.

    Dato, en la librería comunitaria de Santa Isabel los venden nuevos y usados, también hay otras ediciones pero estas son la vedette.

    :)

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